Mientras el brasileño Felipe Massa se recuperaba en el hospital de sus lesiones en la cabeza tras una noche de incertidumbre, el Gran Premio de Fórmula 1 de Hungría constató la resurrección del británico Lewis Hamilton, que se reencontró con el triunfo, y que el campeonato del mundo está abierto gracias al bajón de Brawn GP.
Hamilton ganó cómodamente en el circuito de Hungaroring por delante del finlandés Kimi Raikkonen y del australiano Mark Webber, que se sitúa segundo en la clasificación del campeonato del mundo detrás del británico Jenson Button, séptimo hoy.
Hamilton logró el décimo triunfo de su carrera, el primero del año, el primero desde que se impusiera en China el año pasado, lo que demuestra la mejora de su McLaren-Mercedes. Es el primer triunfo de un equipo que no sea Brawn GP y Red Bull en lo que va de temporada y el primero de un coche con KERS, una de las grandes novedades técnicas de 2009.
"Es increíble estar aquí sentado después de tanto tiempo", dijo el campeón del mundo, que no ganaba desde el 19 de octubre de 2008. "No pensábamos ganar aquí. Tras unos momentos muy duros nos merecemos la victoria. Nunca hemos bajado los brazos. Es fantástico estar de vuelta", agregó Hamilton, de 24 años.
Pero llega tarde para poder defender el título, ya que Button, tras diez carreras, suma 70 puntos con su Brawn GP, por los 51,5 de Webber, que adelanta a su compañero de equipo en Red Bull, el alemán Sebastian Vettel, que partía segundo pero que se tuvo que retirar y se queda con 47 puntos.
"No peleamos por el campeonato, pero espero que podamos conseguir aún varios podios más. Vamos a ver lo lejos que podemos llegar en el título, pero yo ya miro más al año próximo", dijo sincero.
Webber queda ahora como el principal oponente de Button, que ve cómo su coche está perdiendo terreno no sólo respecto a los Red Bull, sino también ante McLaren, Ferrari y Renault, por lo que el título, que se daba por hecho hace unas semanas, ahora ya no está tan claro.
El español Fernando Alonso, que salía desde la "pole position", se retiró en la vuelta 17 por un error de uno de sus mecánicos en la primera parada al colocarle una rueda.
Alonso realizó una gran salida y se mantuvo en cabeza durante 12 vueltas. Hamilton, que partía cuarto, se aprovechó en los primeros metros de la potencia extra que le otorga el KERS para situarse tercero detrás de Alonso y de Webber.
Peor le fueron las cosas a Vettel, segundo hasta hoy en el campeonato del mundo y que tras una mala salida con toque incluido con Raikkonen cayó a la séptima plaza y se tuvo que retirar más tarde en la vuelta 31 por problemas mecánicos. Es el primer fallo de fiabilidad de Red Bull en lo que va de año.
Un primer repostaje demasiado largo de Webber le permitió a Raikkonen situarse segundo detrás de Hamilton, que tras superar al australiano en las primeras vueltas se marchó directo por Alonso, lanzado en solitario en cabeza.
El Renault del español, muy descargado, entró a repostar y a cambiar neumáticos en la vuelta 12. Pero al salir perdió la goma delantera derecha, mal ajustada. Pese a que entró de nuevo en boxes a poner una nueva rueda, los daños en el coche le hicieron abandonar poco después en la vuelta 17.
"Hemos tenido problemas ya en la vuelta cuatro a cinco con la bomba de gasolina, lo que me hacía cambiar los reglajes en el volante. Luego, tras el pit stop sentí que vibraba la rueda y la perdí. Decidí retirarme, esto es el deporte", se resignó el bicampeón mundial.
Hamilton, el campeón del mundo, tenía vía libre para volver a conseguir un triunfo tras un mal año. El McLaren-Mercedes volvía a ser competitivo.
Mucho más que el Brawn GP de Button, que buscaba arañar algún punto y que respiraba tranquilo al menos por la retirada de Vettel.
"No sentimos el coche como hace unas carreras, pero trabajaremos duro para identificar los problemas antes de Valencia", dijo Button de cara a las cuatro semanas de pausa hasta el Gran Premio de Europa.
Hamilton tuvo una carrera plácida y recordó cómo dominaba las carreras en los dos años precedentes. Raikkonen nunca le puso en peligro el triunfo y se conformó con un segundo puesto brindado a su compañero en Ferrari, el accidentado Massa.
"Siamo con te" (Estamos contigo) se leía la pancarta que mostraron los mecánicos de Massa, que hoy se quedaron sin trabajo mientras el piloto se recuperaba en el hospital sin daños cerebrales graves, según los médicos: "Su situación es estable y satisfactoria".
El español Jaime Alguersuari cumplió el objetivo de acabar su primera carrera en la Fórmula 1. Hoy se convirtió en el piloto más joven de la historia con 19 años y 125 días en debutar en el "gran circo" y acabó en el puesto 15 de los 16 que finalizaron la prueba, por delante de su compañero en Toro Rosso, el suizo Sebastian Buemi.
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